El presidente califica la acción como un delito de traición a la patria y advierte sobre las graves consecuencias para la democracia boliviana.

La Paz, 01 de noviembre, (Última Hora).- El presidente Luis Arce ha alzado la voz ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional al denunciar que grupos armados vinculados a Evo Morales han asaltado tres unidades militares en el Chapare, Cochabamba. Este acto, según Arce, no solo representa un delito de traición a la Patria, sino que también es un crimen que se aleja de cualquier reivindicación social legítima.
“La toma de una instalación militar por grupos irregulares en cualquier lugar del mundo es un delito de traición a la Patria”, subrayó el presidente, enfatizando que este hecho constituye “una afrenta a la Constitución Política del Estado, a las Fuerzas Armadas y al propio pueblo boliviano”. Además, Arce hizo un llamado al rechazo colectivo frente a los bloqueos criminales promovidos por Morales y a las acciones delincuenciales que están desestabilizando el país.
Los incidentes comenzaron cuando cocaleros afines a Morales tomaron por asalto el Regimiento “Cacique Juan Maraza” en Villa Tunari, donde retuvieron a militares y personal de salud como rehenes. Las imágenes que han circulado muestran el numeroso armamento militar que ahora se encuentra bajo el control de los movilizados.
Otro grupo de simpatizantes de Morales cercó el Regimiento de Infantería RI-31 “Cnl. Epifanio Ríos”, mientras que también se tomó la Base Naval en Puerto Villarroel. En estos enfrentamientos, se reportó que se habían secuestrado a policías, quienes posteriormente fueron evacuados.
Arce, a través de sus redes sociales, aseveró que “denunciamos ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional que grupos armados afines a Evo Morales han tomado por asalto tres unidades militares, reteniendo como rehenes a militares y sus familias, y amenazando sus vidas”. En su mensaje, el presidente rechazó la narrativa de reivindicación social, señalando que estos actos son “criminales y absolutamente condenables”.
El bloqueo promovido por Morales lleva ya 19 días y tiene como fin asegurar su candidatura y liberarlo de los procesos penales en su contra, incluido uno por mantener una relación con una menor en 2015. Este viernes, ante las crecientes tensiones, el gobierno inició un operativo de desbloqueo, que ha sido enfrentado con el lanzamiento de piedras y explosivos.
Arce enfatizó que lo que busca Morales y sus seguidores es “la ruptura del orden público legalmente constituido y de nuestra democracia, con el único objetivo de acortar nuestro mandato, imponer una candidatura inconstitucional y lograr impunidad en procesos judiciales”.
Afirmó que, tal como había advertido anteriormente, hará uso de sus atribuciones constitucionales para garantizar la paz del pueblo boliviano. “Continuaremos llevando adelante acciones orientadas a restablecer el orden público, precautelando la vida de las bolivianas y bolivianos, la paz social, así como el derecho del pueblo al libre tránsito, al trabajo, al acceso a combustible, alimentos y medicamentos”, concluyó.